Especialistas en
Cultivo de Secano
La agricultura de secano, también conocida como agricultura de temporal, es aquella que no emplea sistemas de riego de ningún tipo, sino que tan solo hace aprovechamiento del agua de las lluvias para el desarrollo de los cultivos. Los cultivos de secano o cultivos sin riego representan una importante categoría dentro de la agricultura ecológica, ya que la siembra es planificada y gestionada atendiendo a las dinámicas de las condiciones y recursos naturales del entorno, aprovechando fundamentalmente la humedad del suelo y las lluvias estacionales.
agricultura
sin irrigación
Aplicación de técnicas de producción agrícola que favorecen la conservación del suelo. Se trata de un tipo de cultivos ideal para zonas geográficas semiáridas, que no cuentan con fuentes de recursos hídricos suficientes
paisaje
mediterráneo
La agricultura de secano tiene gran importancia en la península ibérica dadas las características de su clima, especialmente el que se conoce como clima mediterráneo donde este tipo de explotación agrícola posee relevancia desde tiempos muy antiguos.
Los cultivos de la llamada trilogía mediterránea, es decir, trigo, vid y olivo, usualmente suelen desarrollarse sin el empleo de los sistemas de riego, aprovechando las pocas precipitaciones pluviales durante el año
uso de la
tecnología
La agricultura de secano, aunque basada en métodos tradicionales, no está reñida con los avances de la ciencia y la tecnología .De hecho, ha generado productos esenciales para el intercambio comercial como son la harina, el vino y el aceite, que perfilan la cultura mediterránea.
Los cultivos de secano con la modernización tecnológica tampoco han sido ajenos al mejoramiento de las semillas y la implementación de técnicas de cultivo cada vez más eficientes.
Ventajas
- Favorece el ahorro del agua, optimizando su uso.
- Evita el deterioro de los suelos por mal uso del riego o la utilización de agua inadecuada.
- Necesita de poca mano de obra en la mayor parte de los casos.
- Se aprovechan lugares donde no se cultiva por falta de agua o lugares agrestes, es decir, un terreno abrupto o con desigualdades.
Inconvenientes
- La productividad suele ser menor que en la agricultura dotada de sistemas de riego.
- Es de gran vulnerabilidad ante la alteración del régimen de lluvia o períodos de sequía, sobre todo en los cultivos de ciclo corto.
- Impredecibilidad e incertidumbre con los resultados de una siembra.
- Disminución de la biomasa vegetal.
Castilla y León representa la región donde más explotaciones de cereal se concentran en nuestro país, de hecho, este tipo de cultivo supone un 33 % de su superficie. De hecho, hasta un 95% de sus hectáreas agrícolas se dedican al cereal, en rotación con leguminosas y girasol o con la tradicional práctica del barbecho blanco (plantación de leguminosas que en lugar de recolectarse se entierran en el suelo para enriquecerlo).
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